Es evidente que he tenido la "pluma seca" durante los últimos días y aunque me he acordado de venir a este cuaderno de bitácora y escribir algo, en el último momento no he sabido hacerlo. Se me acumulaban tantas ideas, tantos pensamientos, tantas reflexionar que al final no acertaba a ponerlas en orden y plasmarlas en esta hoja en blanco. "Es mejor tener la boca cerrada y parecer estúpido que abirla y disipar la duda", dijo Mark Twain. Me he atenido a esa reflexión. Tal vez ahora me apreste a disipar la duda.
Me he alegrado una enormidad del triunfo de la selección española en la Eurocopa 2008. Me gusta el fútbol, el buen fútbol, y esos seleccionados lo han hecho.Nos han hecho disfrutar cuando además con su buen fútbol han sabido ganar. He procurado celebrar ese triunfo. Pero esa alegría y satisfacción se solapaba con esos ardores nacionalistas que aparecían por algunos medios. Me temía que ese acontecimiento deportivo diese pie y oportunidad a construir extralimitaciones: que ese triunfo deportivo se llevase a escenarios que no les corresponden. Me temía igualmente que no llegásemos porque me pienso que desde la izquierda aún no hemos superado la utilización del deporte como "adormidera" de las masas y parece que todavía nos da una cierta inquietud y temor a que las masas utilicen los símbolos patrióticos y disfruten de los triunfos deportivos internacionales.
Desde otra perspectiva estaba esperanzado en la celebración del Congreso Federal del PSOE durante el próximo fin de semana. Confiaba en las consideraciones hechas por el responsable de Organización:
"El secretario de Organización del Partido Socialista (PSOE), José Blanco, afirmó hoy que el 37º Congreso de su partido, que se va a celebrar del 4 al 6 de julio, será de "respuestas políticas, renovación y cambios", un congreso "de impulso" y "debate" para hacer frente a los desafíos que tiene la sociedad española y a los cambios que en ella se producen.
( .... )
"Nuestro congreso va a ser diferente al del Partido Popular", que se centró en "cómo la 'congregación marianista' discutía con la otra congregación o congregaciones de la orden", pero en el que "no vimos ninguna respuesta política a los nuevos desafíos, ningún proyecto político nuevo".
Confiaba además de que en el Congreso que se celebraría en una total normalidad, sin urgencias, sin ansiedad proque se estaba en los comienzos de un nuevo mandato recién estrenado se abordarían ciertos temas que habían sido apuntados en la anterior legislatura, que habían sido anunciados en las comparecencias de los más altos responsables en las Cámaras para dar cuenta de los proyectos políticos a abordar en la presente legislatura. Sin embargo, esa esperanza ha sido amortiguada cuando en los medios de comunicación han aparecido las maniobras para que esos asuntos no fueran abordados o fueran descafeinados arguyendo que recientemente el electorado ha dado su aprobación a un programa electoral y por tanto no será pertinente modificarlo a los pocos meses. En el PSOE desde su fundación se hacía una distinción: el programa de máximos o de a largo plazo y el programa de mínimos o programa a medio plazo; también existe la distinción entre progrma de gobierno, progrma electoral y las resoluciones de un Congreso. Éstas han de ser las que señalen la dirección a tomar, la estrategia a ejecutar y el marco en el que han de elaborarse los distintos programas electorales. ¿Por qué coartar la libre deliberación de los delegados asistentes al Congreso?Me han tubado otros asuntos que ya en otros momentos reflejaré en este cuaderno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario